Aunque a regañadientes, últimamente no me apetece en exceso tratar ciertos asuntos, voy a dedicar la entrada de hoy y la siguiente a los sucesos que están ocurriendo en Grecia, creo que conocidos por todos los lectores, por lo que le ahorraré una explicación, más o menos exhaustiva, sobre la historia reciente del país de los Dioses Olímpicos. Cuestión que por otra parte abordé en la entrada titulada: "Grecia: corrupción, mentiras, neoliberalismo y miseria".
Desde el punto de vista del observador externo lo que está aconteciendo en Grecia me interesa porque constituye un ejemplo de todo aquello que nos ha llevado a esta crisis y, de la misma forma, puede servir para ilustrar la estupidez y la hipocresía de unos y otros, políticos, economistas y medios de comunicación, que no de información, respecto al tan manido tema de la crisis. Igual que Chile se convirtió en laboratorio del neoliberalismo en la época de Pinochet, Grecia se ha convertido en el paradigma de todo aquello que son capaces de hacer contra los ciudadanos las autoridades, tantos las políticas como las económicas, que, en el fondo y en la superficie, por desgracia son la misma cosa.
A nadie se le escapa que los problemas del país heleno comenzaron, o al menos recibieron un buen impulso, cuando dicho país falseó las cuentas para poder ser incluido en la zona euro. Dicha distorsión contable fue posible gracias a la ayuda de la gran banca, a la complicidad de la clase política griega y al asentimiento cómplice de las autoridades de la Unión Europea. En definitiva: todos los actores que, tras una gran variedad de recetas económicas, siguen arrojando sal sobre la herida griega, aumentando el dolor y el sufrimiento de los ciudadanos helenos. Los mismos protagonistas con la misma forma de actuar que condujo a la crisis y que sigue siendo la seña de identidad de bancos y ciertas empresas: la adulteración de la contabilidad para ajustarla a los fines perseguidos. Los fines que benefician a la minoría que se puede permitir el lujo de maquillar los balances.
No podría faltar la gran banca. Como se ha podido comprobar cuando la banca privada invierte pensando en grandes beneficios y muy rápidos suele perder pasta, pues esas inversiones se convierten en actividades de riesgo. ¿Qué ocurre cuando esto ocurre? Lo ya consabido: cuando un gran banco fracasa el Estado le "socorre" con dinero público, con nuestro dinero. Se ha comprobado en el caso griego y en EE.UU., Alemania, Irlanda, Reino Unido, Francia... No sólo eso, los políticos nos venden que financiar a bancos quebrados tras atroces operaciones especulativas es lo mejor que se puede hacer. Mentira. Lo mejor es crear una banca pública, como expuse y argumenté en una entrada anterior, dejando caer a los que han administrado horriblemente su capital.
No sólo se acude a socorrer a los bancos cuando estos fracasan, cuando no existe tal necesidad de intervenir para evitar la "catástrofe" financiera, ocurre que el B.C.E. también, en cierta forma, les socorre. Prueba de ello son los préstamos de dicha entidad económica supranacional al 1% a la banca privada. Dinero que a su vez se prestan entre ellos a un interés que se denomina EURIBOR, siempre mayor que el 1% y dinero, que repito sale del B.C.E., es decir es nuestro dinero, que nos llega, si nos llega, a un interés bastante más alto. En resumen, como explica Vincenç Navarro, el B.C.E. no es un verdadero banco central, no se creó para procurar el bienestar de los ciudadanos europeos. Su función real es intentar que la banca tenga el dinero suficiente, de ahí que haya sido tan reticente a comprar deuda pública de los países de la U.E., evitando la quiebra por el empuje de los especuladores, entre los que se encuentran los bancos a los que presta dinero al 1%.
Otro de los aspectos cruciales en esta crisis, y que en Grecia se puede observar igualmente, es la manipulación de las cuentas que lleva aparejado, como podemos comprobar en este caso, la manipulación de las percepciones sobre los hechos. Me explico. El P.I.B. de Grecia representa el 0,1% del P.I.B. mundial y un porcentaje mayor, pero igualmente poco significativo del P.I.B. de la U.E., que en conjunto es la zona económica más potente del mundo, sin embargo, a pesar del peso anecdótico del país heleno, los problemas griegos constituyen la madre de todas las calamidades (pareciera que se hubiese abierto la Caja de Pandora). ¿Cómo es posible que una país con tan poca influencia económica pueda generar un tsunami que parece poder tragarse todo lo que se le ponga por delante? Uno intuye que todo es debido a los famosos mercados???, que uno entiende que se reducen a dos cosas: los intereses de ciertos bancos de inversión, fondos de inversión y multinacionales y, en segundo lugar, a un estado de opinión, creada por estos mismos actores y difundidas por economistas, o lo que fueren, y periodistas, o lo que fueren, afines a estas grandes corporaciones con una única finalidad: favorecer a dichas compañías. Cualquier excusa sirve para arrimar el ascua a su sardina, sin importar en exceso la veracidad o no de lo que se defiende como real ni la situación en que se van a encontrar los ciudadanos afectados por los ataques de dichas entidades.
Dentro de esta manipulación de las percepciones sobre los hechos merece un capítulo especial la focalización exclusiva que se hace en determinados aspectos, obviando otros. Si el lector preguntara cual es el problema más grave que nos ha traído la crisis, casi con total probabilidad le responderían que en España el paro. Sin embargo si no se focalizara la atención en nuestro país y se tratase de la crisis internacional, mucha gente no dudaría en reseñar el problema financiero como el eje sobre el que gira todo. Pues siento decepcionar al lector, pero el mayor problema en un número significativo de países es el paro, en algunos lugares es evidente, como en nuestro país, en otros las cifras se maquillan convenientemente para que el número de parados parezca menor que el que existe en realidad. Sin embargo queda mejor hablar de lo que interesa a los que tienen la sartén por el mango: "los problemas financieros". En Grecia lo podemos observar este fenómeno con claridad: el tanto por cierto de personas desempleadas es del 16%, pero lo importante no es este asunto, lo importante es que no se puede pagar a los especuladores la deuda contraída con ellos, entre otras cosas porque jugaron a la ruleta y perdieron.
Como se puede comprobar la manipulación interesada sirve para centrar la atención sobre lo deseado, no sobre los problemas reales de millones de personas. Baste decir que el paro entre los jóvenes en Europa ha sufrido un aumento de casi un 10% en estos últimos cuatro años. Se ha pasado de un 15% a un 25%, pero eso parece no ser un problema para los gurús de la economía.
Por hoy ya he torturado en demasía al amable lector, por lo que parece oportuno dejarle descansar y retomar el asunto mañana, si es que aún le quedan ganas de leer este blog.
Un saludo.
No podría faltar la gran banca. Como se ha podido comprobar cuando la banca privada invierte pensando en grandes beneficios y muy rápidos suele perder pasta, pues esas inversiones se convierten en actividades de riesgo. ¿Qué ocurre cuando esto ocurre? Lo ya consabido: cuando un gran banco fracasa el Estado le "socorre" con dinero público, con nuestro dinero. Se ha comprobado en el caso griego y en EE.UU., Alemania, Irlanda, Reino Unido, Francia... No sólo eso, los políticos nos venden que financiar a bancos quebrados tras atroces operaciones especulativas es lo mejor que se puede hacer. Mentira. Lo mejor es crear una banca pública, como expuse y argumenté en una entrada anterior, dejando caer a los que han administrado horriblemente su capital.
No sólo se acude a socorrer a los bancos cuando estos fracasan, cuando no existe tal necesidad de intervenir para evitar la "catástrofe" financiera, ocurre que el B.C.E. también, en cierta forma, les socorre. Prueba de ello son los préstamos de dicha entidad económica supranacional al 1% a la banca privada. Dinero que a su vez se prestan entre ellos a un interés que se denomina EURIBOR, siempre mayor que el 1% y dinero, que repito sale del B.C.E., es decir es nuestro dinero, que nos llega, si nos llega, a un interés bastante más alto. En resumen, como explica Vincenç Navarro, el B.C.E. no es un verdadero banco central, no se creó para procurar el bienestar de los ciudadanos europeos. Su función real es intentar que la banca tenga el dinero suficiente, de ahí que haya sido tan reticente a comprar deuda pública de los países de la U.E., evitando la quiebra por el empuje de los especuladores, entre los que se encuentran los bancos a los que presta dinero al 1%.
Otro de los aspectos cruciales en esta crisis, y que en Grecia se puede observar igualmente, es la manipulación de las cuentas que lleva aparejado, como podemos comprobar en este caso, la manipulación de las percepciones sobre los hechos. Me explico. El P.I.B. de Grecia representa el 0,1% del P.I.B. mundial y un porcentaje mayor, pero igualmente poco significativo del P.I.B. de la U.E., que en conjunto es la zona económica más potente del mundo, sin embargo, a pesar del peso anecdótico del país heleno, los problemas griegos constituyen la madre de todas las calamidades (pareciera que se hubiese abierto la Caja de Pandora). ¿Cómo es posible que una país con tan poca influencia económica pueda generar un tsunami que parece poder tragarse todo lo que se le ponga por delante? Uno intuye que todo es debido a los famosos mercados???, que uno entiende que se reducen a dos cosas: los intereses de ciertos bancos de inversión, fondos de inversión y multinacionales y, en segundo lugar, a un estado de opinión, creada por estos mismos actores y difundidas por economistas, o lo que fueren, y periodistas, o lo que fueren, afines a estas grandes corporaciones con una única finalidad: favorecer a dichas compañías. Cualquier excusa sirve para arrimar el ascua a su sardina, sin importar en exceso la veracidad o no de lo que se defiende como real ni la situación en que se van a encontrar los ciudadanos afectados por los ataques de dichas entidades.
Dentro de esta manipulación de las percepciones sobre los hechos merece un capítulo especial la focalización exclusiva que se hace en determinados aspectos, obviando otros. Si el lector preguntara cual es el problema más grave que nos ha traído la crisis, casi con total probabilidad le responderían que en España el paro. Sin embargo si no se focalizara la atención en nuestro país y se tratase de la crisis internacional, mucha gente no dudaría en reseñar el problema financiero como el eje sobre el que gira todo. Pues siento decepcionar al lector, pero el mayor problema en un número significativo de países es el paro, en algunos lugares es evidente, como en nuestro país, en otros las cifras se maquillan convenientemente para que el número de parados parezca menor que el que existe en realidad. Sin embargo queda mejor hablar de lo que interesa a los que tienen la sartén por el mango: "los problemas financieros". En Grecia lo podemos observar este fenómeno con claridad: el tanto por cierto de personas desempleadas es del 16%, pero lo importante no es este asunto, lo importante es que no se puede pagar a los especuladores la deuda contraída con ellos, entre otras cosas porque jugaron a la ruleta y perdieron.
Como se puede comprobar la manipulación interesada sirve para centrar la atención sobre lo deseado, no sobre los problemas reales de millones de personas. Baste decir que el paro entre los jóvenes en Europa ha sufrido un aumento de casi un 10% en estos últimos cuatro años. Se ha pasado de un 15% a un 25%, pero eso parece no ser un problema para los gurús de la economía.
Por hoy ya he torturado en demasía al amable lector, por lo que parece oportuno dejarle descansar y retomar el asunto mañana, si es que aún le quedan ganas de leer este blog.
Un saludo.
2 comentarios:
Hola Paco: Estoy de acuerdo,pero además un paro generado por, y principalmente,por el sistema financiero.El perro que se muerde la cola.
Lo de Grecia no es más que una cortina de humo de los problemas de fondo.Los mercados se asustan del referéndum, es de risa ,se asusta de aspectos de una democracia.Justo eso viene a decirnos que es una dictadura.
Otro tema ,es por qué Papandreu ahora se plantea un referéndum.
Es que lo de Grecia no sólo no lo explican bien,sino que se guardan puñales en los bolsillos.
El tema de la quita habría que explicarlo mejor,porque muchos piensan que encima que Alemania hace tan "digno" gesto,ellos se mosquean.
Pero así me lo explicaba el otro día un griego:
"Tengo una deuda de tarjeta de crédito de 200.000 millones, me hacen una quita de 50%, es decir de 100.000 millones pero con la condición que acepte otra deuda,esta vez de hipoteca de 100.000 millones mas 30.000 millones que van a dar a los bancos griegos para no quiebrar. Total que cambio una deuda de tarjeta, sin hipoteca, de 100.000 millones por otra con hipoteca de 130.000 millones. Eso se llama perdonar el 50% de la deuda griega. Yo lo llamo buscar y encontrar primos. Yo NO quiero este contrato.Si hay otro lo estudiamos".
Hay hambre en Grecia,hay suicidios,hay enfermedad y hay mucho miedo.Saludos!
Hola, Claudia.
Parece que anticiparas el contenido de la segunda parte que he publicado hoy, donde coincido con alguno de los planteamientos que dejas en tu comentario.
Por lo demás, todo son artificios contables para que los que mandan y sus lacayos sigan haciendo de las suyas, llevando a extremos de sufrimiento inaceptables a los ciudadanos de los diferentes países.
Un saludo.
Publicar un comentario