Aunque ya ocurrió la semana pasada, he decidido descansar, al menos, un día a la semana de esta mi ocupación bloguera. Una vez comenzado el curso, mi tiempo libre ha disminuido significativamente y necesito momentos para realizar otras actividades que, igualmente, me llenan tanto como garrapatear letras en este blog, por lo que debo ir haciendo equilibrios para compatibilizar mi vida personal, profesional y bloguera. Tras analizar la cuestión en profundidad decidí que lo mejor era buscar un equilibrio entre todo, sin, obviamente, abandonar nada (lo de ser padre no pensaba abandonarlo). Por ello, a partir de hoy, al menos durante un día a la semana guardaré silenció en las pantallas de los lectores, sé que éstos me lo sabrán agradecer, lo que me permitirá un mayor descanso y, si mis escasas neuronas lo permiten, unas mejores entradas, cuestión que todo el mundo me agradecerá, incluido el fulano, le llamo fulano porque el firmaba como anónimo, que me quería convencer hace poco, escribiendo en este blog, de que el fin del mundo se avecinaba y que me arrepintiera de no sé que maldades.
También me gustaría aclarar que no existirá un día fijo para descansar, dependerá de las circunstancias de mi vida y del grado de cansancio que mi ya cascado cuerpo acumule, aunque intentaré que la mayoría de los días de asueto coincidan con el sábado y el domingo (las resacas a mi edad son muy malas).
Para celebrarlo un poquito de música.
Un saludo.
2 comentarios:
Feliz descanso!,así debe de ser,tiempo para las cosas más importantes de nuestras vidas incluyendo el descanso,lo demás siendo del agrado ,no lo son.
Un abrazo!
Gracias por la comprensión.
Un saludo.
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