miércoles, 16 de mayo de 2012

UNAS CUANTAS REFLEXIONES

El alcalde de Valladolid, el Javi, destina 180.000 euros a una corrida de toros, mientras acabará con varios cursos superiores de la Escuela de Música. Bajo el estúpido argumento de que la corrida atraerá a gente de fuera que hará gasto en la ciudad el edil escuda su actuación. Si tanta gente va a ir a Valladolid y tanto gasto van a hacer, ¿por qué no pagan los hosteleros la corrida, que son los teóricos beneficiados? ¿Por qué estos tipos del P.P. cuando quieren confunden lo público con lo privado, especialmente si beneficia a unos pocos? ¿Por qué estos tipos no tienen ningún problema en robar derechos de todos mientras practican estas políticas basadas en regalar dinero a unos pocos?

Hace un par de días recordaba que alguien, desconozco quien, escribió un comentario diciendo que no tenía ni idea de Economía. Es cierto, no he estudiado Economía, pero a diferencia de aquellos que dicen saber mucho de Economía, yo no he tenido que variar ni un ápice mis percepciones sobre la situación. Resulta sorprendente que cierta gente se esté lucrando vendiendo la moto sobre sus conocimientos, obviando que basta con aplicar la lógica para que todo funcione con cierta eficiencia. Por cierto, ¿por qué muchos tipos que lo único que pueden aportar es una carrera de desastres continuos siguen siendo considerados expertos en Economía?

Cuando un ciclista con aspiraciones a ganar el Tour enferma el día en que se disputa la prueba reina calla e intenta que sus rivales no adviertan su debilidad Sin embargo, en Economía los que se denomnan expertos, que dicen dirigir nuestros destinos, fían todo a que los rivales, los especuladores, tengan a bien concedernos el beneficio de su caridad. ¿Se imagina el lector a Alberto Contador hablando con sus rivales para que no le ataquen subiendo el Tourmalet porque no se encuentra bien físicamente? Pues estos tipos, hablan con sus rivales, de los que en breve formarán parte, para que entiendan la profundidad de las medidas tomadas, pidiendo que no ataquen desde la primera curva. Parece que el clembuterol y la EPO no sólo la toman los ciclistas.

Leo que la Policia se ha dedicado a pedir el DNI a las personas que hacían cola para cancelar sus cuentas en Bankia. Parece que el Gobierno ha decidido criminalizar a todos aquellos que deciden hacer lo que les dé la gana con su dinero. Se nota que no tienen mucho, pues de otra forma los gobernantes actuales no hubieran dudado en modificar la legislación para convertir determinados lugares en paraísos fiscales.

Los "entendidos" critican que seamos un país cuya mayor industria es el turismo. Hace falta ser gilipollas para no comprender que debemos empezar a construir un nuevo modelo aprovechando lo que funciona bien, eso sí sin masacrar nuestro patrimonio natural, y a partir de ahí diversificar nuestras posibilidades de creación de riqueza, especiamente potenciando la agricultura, donde podemos ofrecer, y ofrecemos, productos de excelente calidad, y la investigación y el desarrollo, la asignatura pendiente del país.

Tras leer la portada del panfleto La Razón que intentaba denigrar a personas del Sindicato de Estudiantes por su supuesto currículum, y ver el de algunos de los prebostes de dicha publicación que se desprestigia por si misma, he llegado a la siguiente conclusión: no es necesario ser inteligente ni brillante, incluso, a veces, es contraproducente, basta con seguir la doctrina oficial y lamer los culos adecuados. Resulta más productivo arrimarse al calor del poder y del dinero que la coherencia y la inteligencia. El grito de Millán: ¡muerte a la inteligencia! sigue más presente que nunca en nuestro país.

Sería bueno tirar de hemerotecas y comparar lo que opinaban los ineptos comentaristas de derechas, y muchos progresistas, hace unos meses y lo que opinan hoy. Podríamos pasar un buen rato escuchando sus opiniones sobre las medidas a tomar hace, por ejemplo, medio año y las medidas que hoy son impepinables. Recuerdo como no hace mucho aseguraba en Antena 3 que la Comunidad de Valencia iba a ser intervenida en menos de diez días. Han pasado los diez días y nadie a intervenido a nadie. El fulano que dio la "primicia" sigue ocupando un asiento en la misma tertulia.

Puede que sea una estupidez, pero si un cierto número de ciudadanos españoles sacásemos el dinero de los bancos acabaríamos con la Unión Europea tal como la conocemos. El rescate de los bancos españoles, ya contemplado desde noviembre, o la salida del euro, generarían tal problema, no sólo a España, si no a toda la U.E., que debería apoquinar decenas de miles de millones de euros (que en teoría ya están preparados) para salvar a los bancos de la quiebra, detrayendo ese dinero de los presupuestos nacionales, que todo el sistema reventaría. Curioso, unos cuantos cientos de miles de ciudadanos, o dos o tres millones a lo sumo, tienen más poder que todos los economistas y políticos juntos. Da que pensar.

Todo el mundo culpa al incompetente, inútil y fascista económico que ha regido el Banco de España durante los últimos seis años de la crisis de Bankia y el sistema. Desde este blog se ha defendido repetidamente la inutilidad del personaje, que linda con lo penal, pero no olvidemos que el desastre de la cajas se ha debido a todas las componendas políticas llevadas a cabo para que cada partido metiera a los suyos y controlara el cotarro, para así poder financiar a los coleguillas. Por tanto, MAFO, es un impresentable, pero los que le critican ahora, callados como perros hasta hace unos días, son iguamente responsables del desaguisado cometido en la cajas.

El tal Wert ha conseguido lo que nadie había sido capaz de realizar en este país: unir a todos los sindicatos, a la asociación de padres y madres mayoritaria del país y a los sindicatos de estudiantes en su contra. Parece que cuenta más en este país encrespar los ánimos, ayudando un poquito con sus absurdas declaraciones, que conocer en profundidad el tema sobre el que les toca regir. Seguimos pensando que el "muerte a la inteligencia" de Millán Astray es válido para gobernar este país.

De nuevo vuelvo a leer que los recortes son consecuencia de los abusos cometidos, eso sí por parte de los ciudadanos. Me resulta extraño que ninguno de los que esgrime este argumento haya realizado anteriormente, tampoco a fecha de hoy, denuncias públicas contra personas o entidades concretas.

Resulta gracioso, aunque el calificativo más adecuado puede ser patético, ver como ciertos plumillas se refocilan criticando a Grecia y a sus ciudadanos para, sin solución de continuidad, indignarse cuando algún mandatario internacional, pongamos a Monti, nos descalifican como país. En el fondo muchos arrastran la vieja idea supremacista del franquismo. Lástima que este país no haya seguido alguna de las consignas, especialmente esa que dice España libre; de estúpidos iletrados, añadiría yo.

Leo en el semanario de humor e información Mongolia, muy recomendable, la biografía laboral del marido de Cospedal. Es triste que este modelo de "empresario", si nos atenemos a la información proporcionada por el semanario, compartan este país con el resto de ciudadanos. Imagino que a esto no se refieren los unos y los otros cuando hablan de abusos.

En Extremadura se han sucedido varias dimisiones entre miembros del ejecutivo regional y cargos nombrados a dedo por el Gobierno.  En todos los casos estas dimisiones están relacionadas con incompatibilidades entre los negocios privados y sus cargos públicos. Es oportuno resaltar que ninguno parecía conocer estas incompatibilidades, ¿quién elige a estos tipos tan desconocedores de las leyes? Especialmente reseñable es el caso del delegado del Gobierno de Extremadura, que decía no conocer la incompatibilidad entre poseer una farmacia y ocupar su cargo. De haberlo sabido habría seguido siendo parlamentario, concluyó diciendo. Ante estas dos aseveraciones uno se pregunta: ¿cómo va a hacer cumplir la ley alguien que lo desconoce? Y dos: ¿es posible que alguien pueda no tener ningún inconveniente en decir que lo que quiere es mamar del bote?

Carlos Divar, el presidente del Consejo del Poder Judicial, miembro del Opus nombrado por Zapatero, tras ser pillado gastando dinero público, de todos, en cuestiones relacionadas con su ocio personal, declara que los cinco mil euros gastados son una miseria (realmente parece que fue bastante más). Uno tiene la impresión de que este tipo sabe de lo que habla, pues la miseria moral que debe caracterizar a una persona para hacer estas declaraciones en un país con más del 20% de la población en paro, es mayúscula.

Resulta curioso que un fulano que trabaja de obispo en Alcalá quiera aportar pruebas de supuestas curaciones de personas homosexuales. Uno, que por su trabajo sabe algo de manuales de criterios diagnósticos psiquiátricos, recuerda que en la DSM III se descartó la homosexualidad como enfermedad (hace algo más de 30 años), por lo que no hay duda de que el anciano chochea. Pero si siguiéramos su lógica, uno podía pensar que las supuestas curaciones de personas que abandonan el sacerdocio es porcentualmente mucho mayor que las supuestas curaciones de personas homosexuales.

Tal vez la reflexión más importante sea la que sigue que, por cierto, sirve para finiquitar la entrada de hoy. Aunque parezca que han pasado cinco años desde la llegada del poder del P.P., han transcurrido cinco meses escasos. Este gobierno, igual que otros muchos, encuentran una única forma de afrontar la realidad: saliendo al paso de los rumores de cada día. El cortoplacismo, que a veces consigue que una medida de ayer sea inútil hoy, constituye una forma de gobernar necia. Nadie que no tenga una visión a medio y corto plazo de la situación realizará su función en condiciones y muchos menos conseguirá el bien de los ciudadanos a los que dicen representar. Tal vez debamos todos pararnos unos minutos y contemplar de dónde venimos para saber qué queremos. Las políticas necias de corte cortoplacista nos abocan al fracaso.

Concluyo con un vídeo de un eurodiputado que defiende en una intervención algunos de los supuestos defendidos en ese blog desde hace tiempo. Dos minutos de realidad descarnada.


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