martes, 2 de noviembre de 2010

MÚSICA BIDIMENSIONAL

Una de las grandes ilusiones de la pintura es conseguir que un cuadro concluido, que no deja de ser un lienzo bidimensional, nos transmita la idea de que lo allí pintado tiene tres dimensiones. Para ello se utilizan diversas técnicas que aportan esta impresión. Entre estas técnicas podemos encontrar: ir disminuyendo el tamaño de las figuras o del paisaje para crear sensación de lejanía, oscurecer más lo que se pretende hacer aparecer como distantes, difuminar, progresivamente, los objetos o las personas en función de la supuesta distancia al espectador, utilización de líneas de fuga, etc. En definitiva, pequeños trucos para burlar a la realidad y engañar los sentidos, aportando calidad y sentido a la composición pictórica.
Toda esta perorata tiene la intención de servir como introducción al tema de hoy: la música Indie, alternativa o como narices se quiera llamar.
Ayer sufrí una experiencia terrible, por motivos bien distintos, escuchando a dos grupos de esa tendencia en momentos distintos del día.
Por la mañana, al leer un periódico digital, fisgué en un blog dedicado a la música. En dicho espacio se hacía referencia a un grupo español, presuntamente lo más de lo más, que, tristemente, ejecutaban un tipo de pop archiconocido y repetido por otros grupos anteriores hasta la saciedad. Además, uno se quedo perplejo escuhando a músicos lineales que apenas aportaban ninguna variación durante la canción a sus postulados iniciales. Un batería plano, un teclado infrautilizado... En otras palabras, una música que no variaba apenas desde el segundo uno de la canción hasta el segundo final de la misma.
Pero mi calvario musical no acabó aquí. En una emisora nacional, ya por la noche, se presenta a otro grupo, del mismo tipo, que habían ejecutado su obra en acústico, guitarra y voz. Queriéndome quitar el mal sabor de boca de la mañana, asisto espectante a esta "joya" del arte moderno. ¡Dios, qué horror! La tipa que perpetraba la canción estuvo a punto de destrozarme la audición cuando pretendía ejecutar los agudos. Baste decir que no pude evitar acordarme del vídeo que circula en Youtube de Enrique Iglesias berreando.
Ya no se trataba de música previsible y simple, era algo peor, un atentado contra el sentido de la audición.
Tras estas experiencias, me decidí a escribir esta entrada. 
Uno no es experto en música, pero posee unos criterios que le permiten disfrutar de casi todo tipo de composiciones y estilos, sin embargo ciertas cosas traspasan el umbral de aceptación que tengo del arte musical. Comprendo, es necesario, que deba existir una alternativa a la, generalmente, nefasta música de las radiofórmulas, pero si la alternativa es ésta, apaga y vámonos.
Estos tipos, que ejecutan piezas musicales en el peor sentido de la palabra, parecen pintores que, en la ejecución de sus piezas artísticas, aún no han descubierto los trucos de la tridimensionalidad. ¡Qué pena!
Un saludo.

2 comentarios:

santos dijo...

Como se nota que sales poco por la noche..."música" esperpentica,Paco,y claro,no me extraña,si esa es la alternativa, pues...a escuchar los 40 y el parrapapá...así está la generación nini...con shakira como referencia que puedes esperar.

Spaski dijo...

pasate a otros tipos de musica ;- y no pongas la radio!!!