domingo, 28 de noviembre de 2010

RESACA Y AMIGOS

Hoy es un mal día para escribir. En mi cabeza habitan una multitud de obreros que golpean sin piedad al ritmo del último gin-tonic. Ya no estoy para estos trotes.
Sin embargo, estoy contento. Ayer nos reunimos, tras mucho tiempo intentándolo, cuatro parejas para cenar y comentar las mejores jugadas. 
Estoy contento por que  siete u ocho años después de conocernos  trabajando en un colegio en el que ninguno seguimos, sentimos la necesidad de quedar para compartir un ratito de nuestras vidas.
Estoy contento por que cuando nos conocimos ninguno teníamos hijos y ahora todos los tenemos y nuestra amistad evoluciona a la par que nuestras obligaciones, ilusiones y, en algún caso, frustraciones.
Estoy contento por que el tiempo, la distancia, cada pareja vivimos en una localidad diferente, no ha servido para separarnos. Más bien tenemos una excusa para visitar una parte distinta de la maravillosa geografía extremeña, compartiendo risas y experiencias.
Estoy contento por que cuando hablamos de nuestra profesión, cinco de los ocho que nos juntamos ayer somos maestros, me identifico con ellas. 
Incluso, tal vez, esté contento por tener esta resaca de buen vino y gin-tonics.
Estoy contento por que hoy no tengo ganas de ser Islero y arremeter contra el mundo.
Estoy contento por que el tema de hoy es algo alegre y, al menos, tan trascendente como todo lo escrito en días anteriores, por lo menos para mi.
En definitiva estoy resacoso y contento.
Un saludo.

1 comentario:

Spaski dijo...

Joer, es que eso es la esencia de la vida. Esos grandes momentos, con tu gente, con un buen vino, hablando y escuchando. Que bonita es la vida coño.
Yo también soy maestro (en cierto modo) y es una profesion agotadora e ilusionante a partes iguales.
Saludos!